Con una participación ciudadana de menos del 12% la revocación de mandato confirmó que a la ciudadanía no le interesa participar en simulaciones, lo que los ciudadanos quieren son resultados en salud, economía y seguridad. No lograron ni con dádivas, ni amenazas llevar a la gente que esperaban. Se quedaron muy, pero muy lejos de los votos que obtuvieron en el 2018.
Oficialmente se gastaron 1,700 millones para la organización de la consulta, más todos los recursos no oficiales para la movilización de gente, los cientos de espectaculares que se instalaron por todo el país, volantes, etc. Pero cancelaron las escuelas de tiempo completo que beneficiaban a 74 mil niñas y niños, la compra de medicamentos o en las estancias infantiles que ayudaban a más de 54 mil mujeres trabajadoras, con la justificación de que no hay recursos.
A pesar de haber usado todo el aparato del Estado, hasta el avión de la Guardia Nacional para eventos políticos, de haber hecho todo lo ilegal que hicieron, de haber gastado todo lo que gastaron y de haber desviado todos los recursos públicos que desviaron para su tergiversada consulta de revocación, la gran farsa fue un rotundo fracaso.
Por otro lado el trabajo del INE se dio de manera organizada, transparente y con total profesionalismo con la participación de la sociedad civil que busca que se hagan bien las cosas. Desde la trinchera de Acción Nacional seguiremos trabajando para que se respeten las instituciones.
Seguimos en brega de eternidad trabajando para demostrar cómo se debe hacer un gobierno, decisiones y uso de los recursos que incluya el bienestar de todas y todos.