“No vamos a retroceder y caer en un clientelismo político" Rocío Reza

12 de junio, 2019
2 min
“No vamos a retroceder y caer en un clientelismo político con el regreso de la tenencia federal, hacerlo sería retroceder a un gobierno centralista que durante muchos años dañó al país” aseguró la presidenta estatal del PAN, Rocío Reza Gallegos. Los ciudadanos responsables no tienen porque pagar los platos rotos del Gobierno Federal. No a la pretensión del regreso de la tenencia federal “Quieren que los ciudadanos responsables terminen de abultar el clientelismo que pretende instaurar el Presidente López Obrador en México” sostuvo Reza Gallegos. Tras la intención del Gobierno Federal de revivir el impuesto a la tenencia vehicular y replantear el esquema de recaudación del predial, el Partido Acción Nacional (PAN) de Chihuahua, considera esto un atentado contra el federalismo. Tras la reunión celebrada el pasado lunes entre el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, y diputados federales, donde se presentó un análisis para que ambos impuestos pasen a ser jurisdicción de la federación con la intención de recaudar más fondos para el gobierno federal. La presidenta del Comité Directivo Estatal l del PAN, Rocío Reza Gallegos, señaló que hacer lo anterior es retroceder y es una agresión a la economía y autonomía de las entidades federativas, así como de una amenaza real de un gobierno centralista. Indicó que los recursos que se recaudan en el estado por revalidación vehicular se utilizan en obras de infra estructura así como en otros rubros, en los que la federación no aporta un centavo. De revivir “la tenencia federal”, los estados de la República, recibirían tan solo una fracción de ese dinero. Por último la dirigente panista señaló que si bien el presidente Andrés Manuel López Obrador desmintió las declaraciones del subsecretario, sigue el peligro de que se concrete una acción como ésta que dañaría demasiado el presupuesto de ingresos y egresos de los estados, como el de Chihuahua, que además arrastra una deuda histórica por el gobierno de César Duarte, quien se encuentra prófugo de la justicia